Bruno Martelotto y su búsqueda de nuevos desafíos
El sanfrancisqueño presentó días atrás su renuncia como ayudante de campo de Carlos Mazzola y dejó en claro que se trató de una decisión personal, a la vez que apunta a seguir sumando herramientas para nutrirse como entrenador. "Llegué a la conclusión de que lo mejor era cerrar esta etapa y rever mi carrera", dijo.
Fue una decisión meditada, sin segundas intenciones sino, por
el contrario, bien aferrada a las convicciones que lo acompañan: Bruno
Martelotto, días atrás, decidió presentar su renuncia como ayudante de campo de
Carlos Mazzola en el plantel profesional de Sportivo Belgrano.
Lejos de todo problema, aseguró: "Es algo mío. Surgió con la pandemia, porque lo que más había era tiempo para pensar y analizar. Allí comencé a pensar en cómo quería encarar mi carrera desde lo personal y llegué a la conclusión de que lo mejor era cerrar esta etapa y sacar conclusiones, aspectos positivos y negativos que fui viviendo. Básicamente es rever mi carrera, para dónde apuntar y en eso estoy".
Desde que decidió colgar los botines, Martelotto se adentró en su nueva carrera, ser entrenador de fútbol, en Sportivo Belgrano, club del cual es hincha. En la "verde" fue jugador, pasó por las inferiores y luego jugó en la primera. Ya como DT, se inició en la escuelita de fútbol, pasó por la captación, dirigió en las formativas y en la reserva local. En medio, fue analista durante la conducción de Ariel Giaccone y también sumó experiencia, en un rol un tanto más secundario, en el cuerpo técnico de Edgardo Cervilla y durante el interinato de Martín Dell Avanzatto en 2018, fue su ayudante.
Luego sí, en 2019, llegaría su oportunidad como asistente de campo, primero de Cristian Domizi y luego de Carlos Mazzola. En medio de ello, fue el DT interino de Sportivo Belgrano el año pasado ante Defensores de Belgrano de Villa Ramallo, en un cotejo que la visita igualó en el "Oscar C. Boero" en la última jugada por 1 a 1.
En un mano a mano con LA VOZ DE SAN JUSTO, Martelotto contó por qué tomó la decisión de dejar su cargo, sus metas a futuro y su visión del fútbol.
La decisión
Su renuncia al cargo de ayudante de campo fue meditada, lejos de ser tomada a la ligera. "Fue una cuestión personal, no es que me peleé con nadie, es una decisión personal que le comuniqué a Carlos (Mazzola) y a Pablo (Esser). Creo que es lo mejor, son etapas y a veces hay que cerrarlas. Las decisiones a veces pueden salir bien y otras mal pero yo estoy convencido de que era lo mejor", dijo a este medio.
"En el club hice de todo, estuve en la escuelita, en la captación, dirigí en inferiores y en reserva, fui analista, ayudante de campo y entrenador interino, a todo le saqué cosas positivas, fui mejorando mis capacidades y vivenciando cosas buenas que me hicieron aprender mucho", agregó Bruno.
Experiencia
Consultado acerca de los aspectos positivos que le habían dejado sus experiencias en los diversos cuerpos técnicos de la "verde", dijo que "lo principal son las relaciones humanas. La base de todo, más allá de los conocimientos que son importantes y uno debe tenerlos e ir mejorando en cuanto a metodología de entrenamiento. Toda la otra parte es igual o más importante que es la relación con el futbolista, el manejo del grupo, cómo manejarse con cada futbolista en particular porque no todos son iguales, hay que encontrar cómo llegarle a cada uno".
"La única manera de conocer esto, es vivenciarlo. Me tocó vivirlo desde un rol más secundario pero entiendo esas cuestiones porque a mí también me tocó estar del otro lado, como futbolista, donde uno generalmente es más individualista, donde se piensa más para uno mismo. Acá es otra cosa, hay que prepararse mucho, ayuda el haber sido futbolista pero eso no quita que ya se tengan todas las certezas para ser un buen entrenador. Eso es lo que más destaco del rol de ayudante, haber vivenciado esto que no te lo dan los libros, lo tenés que vivir", agregó.
No le cierra las puertas
Durante la amena entrevista, al ser consultado acerca de la posibilidad de continuar en Sportivo Belgrano aunque desde otro rol o comandando alguna categoría en las divisiones formativas, aseguró: "Por supuesto que la posibilidad de seguir vinculado al club está. Si hay algo que yo quiero es al club y no lo digo con demagogia, soy hincha de Sportivo Belgrano".
"Estoy abierto a todo y me pongo a disposición del club para donde crean que yo puedo ser útil, donde pueda ayudar y donde yo esté cómodo, no tengo inconvenientes. Yo amo esta profesión, me preparo todos los días para ser entrenador. ¿Dónde? No lo sé hoy pero no tendría problemas en sumarme a las inferiores. Siempre estuve para el club y lo hice con la mayor predisposición, tratando de hacer lo mejor posible", acotó Martelotto.
A su vez, el exfutbolista de la "verde" se mostró agradecido a todas aquellas personas que le abrieron las puertas en los últimos años, expresando al respecto que "me tocó ser ayudante en dos cuerpos técnicos con dos personas que le dieron al club dos de los títulos más importantes de su historia: Cristian (Domizi) y Carlos (Mazzola), ambos lograron ascensos. Son técnicos prestigiosos que me dieron la oportunidad de aprender con ellos. Después estuve en otra función con Ariel (Giaccone) y con (Edgardo) Cervilla, pero un poco más lejos.
"Yo siempre fui entrenador más allá de que en algún momento fui ayudante o analista, nunca dejé de ser entrenador y ayudante de los futbolistas. Después, dónde me va a encontrar, no lo sé. Donde sea, donde me toque, trataré de disfrutar y poder volcar todo lo que fui sumando en este tiempo", manifestó Martelotto sobre su futuro.
El interinato: "Fue cumplir un sueño"
Tras la salida de Cristian Domizi, en 2019, Martelotto fue designado como entrenador interino de Sportivo Belgrano de cara al choque ante Defensores de Belgrano de Villa Ramallo, jugado en nuestra ciudad, que finalizaría igualado 1-1.
Al respecto, afirmó: "Esa semana fue muy linda. Empezó rara y triste, yo estaba en el cuerpo técnico de Cristian (Domizi) más allá de que yo había llegado sobre el final de su etapa. Durante el interinato, lo importante fue ser claro, nosotros éramos empleados del club y cuando se fue nos tocó asumir. El primer día, ese cimbronazo se siente porque era una persona querida pero rápidamente uno debe ponerse a trabajar, el momento del equipo no era bueno desde lo mental y lo futbolístico pero fue una semana hermosa, que lamentablemente no pudo terminar de la mejor manera por el gol del empate sobre el final".
"Más allá de eso yo volví a sentir lo que no sentía hace mucho. La última vez que había sentido algo similar fue cuando todavía era futbolista, esa ansiedad, esos nervios, ese cosquilleo previo al partido. Me lo dio esa semana y quizá eso me hizo rever algunas cosas de mi carrera, era sentir algo que como entrenador nunca había sentido, obviamente porque la responsabilidad siempre pasa por el DT", continuó.
Posteriormente sostuvo que dirigir a Sportivo "fue cumplir un sueño. Todos los que pasamos alguna vez por el club, desde inferiores, quisimos jugar en la primera y yo lo pude cumplir. Quizá como futbolista no tuve una etapa muy buena, como futbolista no le pude dar al club lo que hubiese querido, es una realidad y por eso me preparo para dárselo desde otro aspecto, quiero devolverle al club desde este lado lo que no pude como futbolista".
Su mirada del fútbol
Consultado acerca de su mirada y sus gustos como entrenador, señaló: "Creo que cada DT tiene una idea, un modelo, pero sin olvidarse que lo importante, y el punto de partida, son los futbolistas. No podemos pensar que somos más importantes que los jugadores, a partir de ahí sí en el ideal de uno, que no siempre se lleva a cabo, me gustan los equipos protagonistas, que manejen la pelota, que se trate de no saltar las fases del juego: que allá una buena iniciación, un buen pasaje por la zona de gestación para tener una buena finalización; poner a nuestros futbolistas creativos con buenas opciones; recuperar rápido ante la pérdida".
Y añadió: "Cada entrenador tiene un modelo pero considero que dentro de lo que yo propongo hay ciertos pilares inamovibles y que el resto se adapta a los futbolistas, al contexto, al estilo y la historia del club, que eso no se puede dejar de lado".
"Me gusta ser un equipo protagonista partiendo del manejo de la pelota, pero muchas veces se confunde eso y se cree que se deja de lado la otra parte que es preparar a un equipo para cuando no tiene el balón. Todo eso parece fácil pero es complicado y hay que entrenarlo mucho. Creo mucho en los entrenamientos para poder luego de manifiesto la creatividad, darle un orden al equipo para que luego en ciertas partes del campo fluya la creatividad. Tampoco es que hay que mecanizar todo, también está la iniciativa del jugador y eso hay que valorizarlo", cerró.