Clima mundial
Ahora sí, a menos de 24 horas de la inauguración, los extranjeros empiezan a aparecer por Moscú y le dan un poco de vida a una ciudad, muy organizada, pero con poco calor futbolístico. Los rusos... bien gracias.
POR LUCIANO OLIVERO
A pesar de la lluvia, LA VOZ DE SAN JUSTO y AM 1050 empezaron a recorrer el corazón de Moscú con la idea empezar a encontrar un poco de calor, en medio de tanto frío.
Si bien los argentinos, son una de las pocas masas de simpatizantes primeras en llegar y en agitar el avispero, ayer, las inmediaciones de la Plaza Roja ya mostraron otros colores.
Argentinos y uruguayos, se unieron en plena siesta rusa, para cantarle a los ausentes chilenos y hacer todo tipo de chistes. De allí, tras un poco de algarabía, a uno de los tantos puestos de hamburguesas y cervezas, para pasar más momentos agradables y empezar a encontrarse entre amigos.
Brasileros, por ahora pocos, pero los que ayer estaban y comenzaron a llegar, le dieron mucho color y poco ruido. Ellos nunca pasan desapercibos y si bien caminaron en silencio, su piel, su color, su camiseta y su bandera, hacen que todo el mundo los mire y les tenga admiración y una sana envidia literalmente hablando.
Hubo espacio para marroquíes, hubo lugar para un grupo de egipcios que cantaban a orillas de la Plaza Roja, algunos uruguayos en familia, japoneses por todos lados y australianos enfiestados con cerveza y alcohol.
De todos modos, el clima mundialista lo pusieron los de la banda. Sí, ayer martes, los peruanos coparon el centro de Moscú, repletos de camisetas y banderas, los fanáticos del equipo de Gareca se llevaron todas las miradas. Los particular, es que un numeroso grupo de familias repleto de color, cantaban y celebran, acompañados de periodistas de aquellos pagos, que no paraban de retractar este acontecimiento.
El clima mundial se activo, fanáticos de todo el mundo le dan color por estas horas a las calles de Moscú que tienen de todo, menos, la algarabía local, ya que por el momento, los rusos, pasan desapercibidos y lejos del bullicio, en medio de su agotadora rutina y mirando la locura del mundial de reojo. ¿Se activarán para la inauguración?