Con un futuro enorme
El juvenil de San Isidro, Federico Zezular, de 16 años, sorprende por sus enormes condiciones y ya sumó minutos importantes en la Liga Argentina. Su entrenador Julián Pagura, y su compañero Germán Sciutto, opinaron sobre este alero cordobés que tiene un interesante porvenir.
Su gran capacidad de salto, su respetable tiro de tres puntos y su corta edad, 16 años recién cumplidos, hacen que el cordobés Federico Zezular, que hace pocos meses se sumó a San Isidro y ya tuvo su debut en la Liga Argentina (ex-TNA), tenga una gran proyección y un futuro enorme en el mundo del básquetbol.
El arribo de Zezular se dio este año al club de calle Corrientes, sobre esto el joven que nació en la ciudad de Córdoba el 09/11/2001 comentó: "Mi llegada a San Isidro se dio por un contacto que tenía el preparador físico de Belgrano de Córdoba, club adonde yo estaba jugando".
Es interesante mencionar que aproximadamente tres años atrás Zezular jugaba al tenis, pero dejó por un problema en el pie. José Atienza, entrenador principal de Belgrano, también es profesor en el Instituto Técnico Villada, lo vio a "Fede" y lo invitó a jugar al básquet al club de Alberdi. Ahí comenzó su relación con este deporte, en el que hoy se destaca.
A pocos días de haberse sumado a los "Halcones Rojos", Zezular se puso a jugar con el equipo U19 y se coronó campeón en el Argentino de Clubes de dicha categoría. Acerca de este importante logro, señaló: "Haber salido campeón argentino con la U19 es algo inexplicable, porque ser el mejor equipo del país es algo que nunca esperé conseguir y la verdad me llenó de alegría".
"Zezu" (tal su apodo) debutó en la Liga Argentina el 27 de octubre en el partido que San Isidro, como local, superó a Deportivo Norte de Armstrong por 86 a 80. En ese juego, el alero de 1,96 m. estuvo 16 minutos dentro del rectángulo de juego, anotó 2 puntos (1/3 en dobles, 0/1 en triples) y capturó 2 rebotes. Sobre esa noche recordó: "Tenía muchos nervios y por suerte jugué bastante".
Cuando fue consultado por su capacidad de salto, el jugador que integró la preselección argentina U16, aclaró: "Es algo que siempre tuve, nunca hice un trabajo especial ni nada parecido".
En cuanto a cómo se siente en San Isidro con sus compañeros y el técnico Julián Pagura, expresó: "Con Julián me llevo muy bien, obviamente la relación es de técnico a jugador, pero la verdad que nunca vi a un entrenador que haga jugar en un equipo profesional a los pibes como lo hace él". Al tiempo que acotó: "Me siento bárbaro dentro del plantel, todos son muy piolas y me ayudaron mucho a poder adaptarme rápido al cambio de equipo y de ciudad".
Cómo lo ve su técnico
Julián Pagura, entrenador principal de los "Halcones Rojos", analizó a Federico Zezular y comentó que "es un jugador con un futuro enorme, muy grande. Es un chico que está haciendo su primera experiencia como profesional, que tiene que profesionalizar un montón de cosas, pero que como jugador tiene mucho futuro por varios motivos. Primero porque tiene una talla importante, segundo porque su físico le permite jugar en varias posiciones, tercero porque tiene buen lanzamiento y cuarto porque tiene brazos largos, y eso, sumado a su capacidad de salto, le sirve para defender a jugadores que se desempeñan en diferentes puestos".
"Federico es un juvenil con un amplio futuro, siempre y cuando trabaje en todos los detalles importantes de la técnica de su mano inhábil, y también en su concentración en el juego a través de su inserción en el equipo profesional. La verdad que lo veo muy bien y con mucho potencial para poder pulir, sin apresuramientos, creo que tiene que tomar esta experiencia que hoy tiene en San Isidro para ir puliendo esos detalles", explicó el entrenador venadense.
La opinión del capitán
Germán Sciutto, capitán y referente de San Isidro, es compañero de Federico Zezular y dio su impresión acerca de este joven valor que llama la atención de muchos. "Es un chico con mucha proyección, como varios pibes del club, y que tiene que aprender mucho. Zezular tiene un toque de calidad que por ahí hace que atléticamente sea mucho más de lo que son en la actualidad los chicos de 15 y 16 años, pero bueno, creo que le falta madurez ya que es muy chico. Pero si se propone entrenar duro, escuchar y aprender, puede llegar muy lejos y ser un basquetbolista de elite".
"Es un jugador que me gusta mucho y creo que puede dar muchas cosas positivas siempre y cuando tenga la intención de crecer y aprender de los entrenadores de San Isidro, que están capacitados para llevarlo a un muy buen nivel", amplió el alero nacido en Marcos Juárez.