Correr o volar, esa es la cuestión
El piloto Leandro Espasandín sigue ensayando en su karting aunque la decisión de estudiar aviación comercial lo obligaría a decidir entre su futuro deportivo y el profesional.
Hace poco se subió al karting para girar por segunda vez en lo que va del año a raíz de la pandemia de coronavirus, una suerte de oasis dentro de un calendario desierto de competencia, una manera de descargar tensiones y más que nada de disfrutar de su pasión.
Una temporada aciaga en la que solo pudo correr la primera fecha del campeonato de la categoría 150cc. Kayak del Open Kart Santafesino con el Gino Motores, su nuevo equipo que le renovó el ánimo tras la amargura sufrida en 2019 cuando fue despojado del título por una fraudulenta maniobra de su ex jefe de equipo.
Escasa acción que Leandro Espasandín lógicamente lamentó y espera desarrollar de mejor forma el año que viene, aunque su continuidad en la especialidad asoma como toda una incógnita. Es que próximo a finalizar el colegio secundario ya empezó a asociar su carrera terciaria al mundo de la aviación civil pensando en una futura tarea profesional.
Por el momento “Lea” seguirá girando para despuntar el vicio, aunque luego llegará la hora de desojar la margarita. Es que el destacado piloto deberá decidir entre seguir aumentando la velocidad en tierra o empezar a tomar vuelo en busca de corporizar su sueño. Ese es el dilema.
-¿De qué manera transitaste esta temporada sin poca actividad?
-Sin subir al karting estuve 8 meses, pero siempre me mantuve entrenando por si teníamos que volver hacerlo bien.
Para eso usé mucho y sigo usando el simulador en casa, yendo también al gimnasio y haciendo calistenia, me mantengo un poco con esas actividades.
Con el simulador llevé el parate bastante bien, pero nunca va a ser lo mismo que correr en una pista real.
-¿Cómo definirías este año?
-Una temporada tirada a la basura. Había corrido la primera fecha del campeonato que fue nocturna en febrero en Gálvez donde venía puntero y se me rompió el motor, después justo antes de la segunda fecha nos comunicaron que se cancelaban las actividades deportivas por el Covid-19.
Recién volví días atrás en las pruebas comunitarias en el circuito San Francisco, que aprovecho para agradecer el trabajo que hicieron los chicos para que podamos volver a estar en actividad.
Me volví a subir y te puedo decir que físicamente hasta mejor, pero con un poquito las muñecas “oxidadas”, y me bajé con algún que otro dolor que me duró unos días (risas).
-¿Qué sensaciones tuviste al volver a girar?
- Fue un descargo de tensiones, porque estaba acostumbrado a tener carreras cada 15 días y estar casi 8 meses sin siquiera subirme arriba del karting fue mucho, si hasta no entraba en la butuca, pasa que me ensanché un poco de espalda.
Fue un descargo lindo porque correr es lo que amo y después de esperar tantos meses. Claro que sin la adrenalina que tienen las carreras, pero fui a divertirme, a disfrutar fundamentalmente. No veía las horas de volver a sentarme en el karting.
-¿Tuvo algo de positivo esta temporada?
-Siempre hay algo positivo, y en este caso me ayudó a estar más concentrado en el gimnasio, lo que no había carreras tuve un mejor tiempo de descanso para entrenar mucho en la semana y estar bien al momento de subirme al karting. De hecho cuando giramos hace unos días pude dar 15 vueltas sin cansarme.
-¿En este 2020 estrenaste equipo nuevo?
-Este año empecé con un nuevo equipo cuyos dueños son Martín y Edgardo Gino quienes se encargan de la parte del motor y chasis, respectivamente.
No iba a correr por la mala experiencia de la temporada anterior, me había bajoneado, pero ellos me llamaron y me dieron esta oportunidad, fueron los que me motivaron a seguir por lo menos un año más.
Somos muy amigos, obviamente que cuando hay que ponerse competitivos lo hacemos, pero existe una gran relación porque son excelentes personas.
-La próxima temporada van a poder correr más tiempo juntos...
-Voy a seguir el año próximo si Dios quiere, y lo digo así por un tema de estudio, porque si bien el karting me gusta no puedo vivir de este deporte y si tengo que estudiar para forjar mi futuro laboral tendré que elegir aunque me duela en el alma pero es mi futuro.
-¿Qué carrera universitaria o terciaria tenes pensado seguir?
-Estoy cursando el último año de la especialidad automotores en la Escuela del Trabajo, de ahí salgo con el título de técnico de automotores y la idea es estudiar aviación comercial.
Para cursar tengo que hacer una parte en Santa Fe y otra en el Aero Club, me gusta volar porque tuve esa experiencia haciendo turismo y una vez me subí acá y quedé fascinado. Pero obviamente nunca pude pilotear un avión pero dentro de poco voy a tener esa posibilidad en el aeroclub.
Por esas experiencias me atrapó la idea de ser piloto, de poder conocer el mundo. Tengo la opción de conseguir la licencia de piloto privado, de instructor de vuelo, de piloto comercial, hay que acumular horas y dependiendo de eso vas probando con el sueño de llegar a alguna aerolínea.
-Entonces el 2021 será un tiempo de decisiones...
-Es una incógnita lo del año que viene. Estudiar aviación me apartaría de correr porque no podría hacer las dos cosas a la vez, la cabeza debo tenerla enfocada en una sola cosa. Por lo pronto voy a seguir entrenando todo lo que más pueda para estar siempre preparado.
El bichito de correr pica siempre, pero bueno, veremos, si hay que estudiar porque se trata de mi futuro lo haremos.
-¿Algo para agregar?
-Agradecer a la familia Gino, Martín y Edgardo por haber confiado en mi trabajo, a mi viejo Fernando que le pone toda la onda, a Rodrigo Bazán, al gimnasio Specialized, Maximiliano Reineri y a LA VOZ DE SAN JUSTO por acompañarme en mi carrera deportiva.