El gran error de los dirigentes
Algunas de cal, otras de arena: No todas las decisiones por "Alberione" son aciertos. La errónea salida de Giaccone, el detonante principal de este amargo y oscuro presente.
La salida de Giaccone, por más que se lo niegue, fue un capricho dirigencial: "Todavía no sé porque me corrieron", le afirmó el DT a LA VOZ DE SAN JUSTO hace algunas horas atrás.
El DT que le sacó agua a las piedras y con un plantel menor al de ahora, estuvo a una llave del ascenso, quiso armar su propio proyecto de trabajo, ser la voz de mando de su plantel y seguir trabajando a su forma; tomar decisiones y elegir sus jugadores, no tuvo respaaldo, y desde la cúpula mayor, como algunas cosas no gustaban o tal vez "no podían manipular", decidieron, así de la nada, darle salida al representativo principal del proyecto que tanto se preponderó: "Jugar con chicos de inferiores".
Nunca hubo explicaciones, o tal vez algunas que no conformaron: "Fue de común acuerdo". "Creemos que se cerró un ciclo". Las habituales frases armadas dentro de este deporte, que solo sirven para tirar la basura debajo de la alfombra.
Ya sin Giaccone, el DT que llevó una innumerable cantidad de juveniles a la plana mayor del club, los dirigentes anunciaron con "bombos y platillos" que el próximo entrenador, seguiría la misma línea de trabajo o que a la hora de contratar, se buscaría uno a imagen y semejanza. Pero no. Eso nunca sucedió.
Para sorpresa de propios y extraños apareció en escena Edgardo Cervilla, un DT de dilatada trayectoria, ya sin ganas de jugar con juveniles, con un método diferente de trabajo y mucha soberbia encima. El polo opuesto a Giaccone.
Muchas cosas no gustaban desde el vamos, pero como esto es fútbol, con resultados todo podría taparse, sin embargo, a poco más de dos meses y medios de su arribo, ya se produce su salida, envuelta en polémica por su destrato a la prensa, su forma de trabajar y su carácter que hasta incluso, lo mantenía lejos de los propios jugadores.
El DT que armó casi un plantel nuevo, enterró a la figura y goleador "verde" del torneo pasado, David Muller, por capricho, por gusto o vaya a saber porque, si nadie en esa posición, pudo hasta el momento, decir que es mejor que el sanfrancisqueño. Relegó a Francia y nunca encontró el equipo.
Los números lo condenaron y su altanería lo hundió en el apoyo popular. Se fue con el peor porcentaje de puntos conseguidos, incluso peor que aquel recordado paso de la dupla Luis Sosa-Cosme Zaccanti en el año 2015 disputando la B Nacional. Edgardo se fue en solo 5 partidos oficiales y un puñado de amistosos. De los 15 puntos en juego, (4 partido de Federal A y 1 de Copa Argentina) cosechó solo 2 (3PP y 2PE) con un pobrísimo 13.33%, un bajo porcentaje que a él mismo nunca le importó, porque su prioridad siempre estuvo en el aumento de la nafta y los alimentos.
Cervilla fue de lo peor que pasó por Sportivo en los últimos años y la salida de Giaccone, el mayor error dirigencial de los últimos tiempos, por más que nunca hagan autocrítica o por más que quieran justificarlo en las próximas declaraciones.
Habrá que apuntar bien ahora porque el panorama es complicado. ¿Habrá autocrítica? Como en las películas, esta columna está basada en hechos reales: números reales, declaraciones inoportunas del DT reales, deseos del hincha por Giaccone reales, todos condimentos tan reales que no pueden dejar de oírse o verse. Será difícil salir de este pozo sin un "nos equivocamos". Esperaremos por el próximo DT, que para suerte del hincha "verde", casi con seguridad, no podrá ser peor.