El señor triatlón
Gastón Montenegro viene de obtener un gran triunfo en La Paz en su primera competencia del año mientras continúa su preparación para el Ironman de Brasil. Habló del crecimiento del triatlón en San Francisco y de lo difícil que fue para él volver a entrenar en la ruta.
Gastón Montenegro lleva más de la mitad de su vida entrenando y practicando triatlón. En sus inicios, eran unos pocos locos los que se animaban a afrontar el duro desafío que este deporte propone: superarse a uno mismo y a las adversidades que se presenten en no una sino tres disciplinas diferentes.
De tanto andar en bici, correr y nadar, el sanfrancisqueño fue consiguiendo un título tras otro. A medida que avanzaba en su carrera, más jóvenes y no tan jóvenes de nuestra ciudad se sumaban a la ola hasta que la tendencia explotó: hoy deportes como el triatlón y el maratón tienen una gran cantidad de adeptos que los practican en diferentes categorías y niveles de exigencias.
Gastón se alegra, casi no lo puede creer. Asegura que si algo lo pone orgulloso de sus resultados es que estos hacen que más gente se interese por el deporte y comience a practicarlo.
"El triatlón llegó para quedarse, no es una moda, sino un estilo de vida", expresará durante la charla.
También hablará de lo difícil que fue volver a salir en la bici a la ruta luego del accidente que sufrió en 2015 en el que perdió la vida su compañero Nicolás Secrestat. "Todavía siento miedo", confiesa pero a la vez afirma que no tiene otra alternativa para entrenar en el nivel que lo hace.
Su primer gran objetivo para este 2018 es el Ironman de Florianópolis, en Brasil, que se correrá en mayo. Y a la preparación la comenzó de la mejor manera: el último sábado logró el triunfo en el triatlón de La Paz, corriendo la distancia Standar (ex olímpica) y logrando un excelente tiempo.
- ¿Qué sensación te quedó después del triunfo?
La satisfacción es total porque mejor no me podría haber ido. Yo fui con expectativas más tranquilas. Si bien iba a dar todo como cada vez que compito, fui más relajado. Siempre a La Paz voy más tenso, más concentrado. Así fue desde que competía en Juveniles y en Elite, que fue hasta el año pasado, que iba con la presión de conseguir resultados. Pero este año fui más relajado, hace 3 semanas que empecé a entrenar con un objetivo que no es el de esta carrera. El 1 de enero empecé con la mira puesta en el Ironman de Brasil, que es una distancia mucho más larga y una carrera muy distinta a las que yo estoy acostumbrado. Entonces fui a La Paz con ganas de divertirme, de utilizarlo como entrenamiento y a la vez empezar a competir. Al final se dio un resultado muy satisfactorio. No es que la pasé bien en toda la carrera, me costó, pero el cuerpo -si bien estaba un poco lento- me respondió a lo que le exigía.
- ¿No es poco 3 semanas de entrenamiento para una carrera de larga distancia?
En realidad yo ya tengo una base. Hace desde los 12 años que hago triatlón y nunca lo dejé por períodos muy prolongados. Entonces nunca arranco de 0 por más que después de participar en la Doble aflojé durante una semana y media.
- ¿De acá a mayo vas a correr en otras competencias similares?
La idea es poder participar en otras competencias para que la preparación no sea tan larga y aburrida, porque si bien el objetivo está puesto en mayo, a mí me gusta competir, es lo que me motiva. Entonces voy a ir participando de otras carreras para ver cómo va el proceso. Este fin de semana tengo una fecha del Campeonato Argentino en San Lorenzo, donde va a haber mucho nivel. Si bien yo no estoy entrenando para esas distancias que son muy explosivas, me viene bien como para meterle ritmo y usarlo como entrenamiento. Pero me voy a manejar con las distancias Sprin, Standar y algún medio Ironman.
- Al otro día de tu triunfo, el que ganó en Elite en la mitad de tu distancia hizo la mitad de tu tiempo ¿lo tomás de referencia?
No es justo compararlo con la carrera del día siguiente porque ahí en ciclismo y pedestrismo hay circuitos y eso te hace variar el tiempo, porque hay retomes y más subidas, se hace más trabado. Sí lo comparo con el tiempo de ediciones anteriores y ahí sí el tiempo estuvo bastante bien. Venían ganando con 2 horas 3, 4 minutos y yo hice 2 horas 0. Corrí la carrera totalmente solo y eso me da un buen parámetro y está bastante bien.
- ¿Cómo es tu rutina de entrenamiento?
Va variando día a día. En esta época del año tengo más tiempo para entrenar así que trato de meter un turno a la mañana, la bici cerca del mediodía y a la tardecita aprovecho para correr. Casi siempre hago dos disciplinas por día y los fines de semanas tengo las tiradas más largas, de 4 o 5 horas, que casi siempre son de ciclismo. Algunos días me coinciden las 3 disciplinas pero son los menos.
- ¿Cómo te la arreglás para entrenar natación?
Nado con el equipo competitivo del Sport. Ahí me ayudan muchísimo porque yo uso el club como si fuera mi segunda casa. La natación es la disciplina más dura para entrenar solo, es difícil sin alguien de afuera que te dé indicaciones, que te tire los tiempos. Por suerte lo tengo a Aníbal Gaviglio, que es con quien yo empecé a nadar y siempre, siempre me dio una mano.
- Es un tema delicado el del entrenamiento en bici...
Sí, es todo un tema. Ahora estoy coincidiendo para entrenar con Javier Donna y Jorge Canello, que también van a ir a Brasil. Ellos me están dando una mano enorme. De hecho Javi es quien me regaló la inscripción y por eso voy, si no, no estaba en mis planes. Nos ayudamos mutuamente.
- ¿No queda otra que salir a la ruta?
No, no queda otra. Después del accidente que tuve, estuve prácticamente un año yendo siempre a la pista y me he estancado muchísimo. Si bien se puede correr, pero no te da lo necesario para progresar en el entrenamiento. Si te ponés a ver no te queda otra alternativa que salir a la ruta.
- ¿Cómo fue el momento de volver a salir a entrenar en ruta para vos?
Ahora ya fui retomando la confianza, pero las primeras veces fue muy difícil. Todavía sigo con un poco de miedo, miro para atrás para cada rato. Me gustaría no tener que salir a la ruta pero es el último recurso que me queda. Aunque no me guste tengo que salir.
La nota completa en la edición de papel de este jueves 25 de LA VOZ DE SAN JUSTO