"Es un desafío y muy grande que me agarra en un gran momento"
Bruno Martelotto, flamante ayudante técnico de Cristian Domizi, se mostró feliz por esta oportunidad de sumarse al plantel profesional. Más de tres años dirigiendo en las formativas del club lo moldearon: "Me sirvieron para llegar a este presente y estar preparado, porque de eso se trata, llegar pero de la mejor manera, estando capacitado y siendo un aporte para el DT".
Desde que regresó de Malasia, poniendo punto final a su
carrera futbolística e iniciando la de entrenador, Bruno Martelotto soñó con
este presente. El martes, oficialmente, se transformó en el ayudante técnico de
Cristian Domizi en el plantel profesional de Sportivo Belgrano, reemplazando a
Diego Gottardi que renunció a su cargo ante una oferta para dirigir.
Hincha del club, con pasado en las divisiones menores del elenco de barrio Alberione y protagonista en dos torneos Argentino B con la "verde", regresó a la institución a mediados de 2016, en primera instancia sumándose a la captación de jugadores y a partir del 2017 inició su faceta como entrenador, por dos años, de la categoría Juvenil (16 y 17 años) y este 2019 de la reserva local.
Si bien tuvo pasos por el cuerpo técnico del plantel profesional, en esta oportunidad es diferente, sabe que su cargo será estable. El año pasado, fue el asistente técnico de Martín Dell' Avanzatto durante su interinato que incluyó tres partidos del Federal A. Antes, participó de la mano de Ariel Giaccone en estadísticas y análisis de videos; luego, con Edgardo Cervilla, su función ya estuvo vinculada a trabajos de campo, algo que continuó durante el primer semestre de Domizi en el club, tras su regreso.
En este 2019 decidió dedicarse de lleno a su categoría, la reserva local que el sábado disputará la semifinal absoluta de la Liga Regional, aunque ya sin su DT. "Dirigir mi categoría me permitía seguir desarrollándome como entrenador, tomar decisiones, planificar entrenamientos, llevar adelante un grupo, eso me lo daba el día a día".
Este paso en su carrera "es un desafío y una responsabilidad muy grande pero que me agarra en un gran momento. Todo lo previo me sirvió para llegar a este presente y estar preparado, porque de eso se trata: llegar pero de la mejor manera, estando preparado y siendo un aporte para Cristian", aseguró.
En diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO, Martelotto repasó sus sensaciones y se mostró agradecido por esta oportunidad.
-¿Cómo comenzó esta nueva etapa en Sportivo Belgrano, ya en la faceta de entrenador?
-Volví a San Francisco, desde Malasia, a finales del 2015 después de mi paso como futbolista. Tuve un mes entrenando en Antártida Argentina pero me terminé decidiendo por dejar definitivamente el fútbol. En ese 2016, me dediqué a mirar fútbol, a capacitarme mientras iba haciendo el curso de entrenador y en septiembre me llamó Fernando Komorovski para sumarme a la captación de los chicos que salían del Baby Fútbol.
Así me sumé al club, primero con la captación. Ya en 2017 me sumé definitivamente, dirigiendo la categoría Juvenil (para chicos de 16 y 17 años y que dirigió por dos temporadas) y en paralelo me recibí de entrenador. Este 2019 ya dirigí la reserva de liga.
-En todo ese tiempo tuviste algunas experiencias en el cuerpo técnico profesional...
Así es, en paralelo al trabajo en inferiores tuve algunos pasos por el cuerpo técnico del plantel profesional. Con Ariel Giaccone, que fue el primero que me sumó, estuve en la parte de estadísticas y algo de análisis de video junto a Ezequiel Visetti. El año pasado estuve con Martín Dell' Avanzatto durante el interinato y antes con Edgardo Cervilla, con quien ya estuve en algunos trabajos más de campo.
Cuando llegó Cristian Domizi continué con ellos un período más, siempre dirigiendo además a mi categoría porque eso era lo que me permitía seguir desarrollándome como entrenador, tomar decisiones, planificar los entrenamientos, llevar adelante un grupo, eso me lo daba el día a día con mi división.
Todos los entrenadores aprendemos de los futbolistas, por eso agradezco a todos los chicos que he dirigido. Ellos me han hecho crecer y si hoy estoy en este lugar es gracias a ellos.
-¿Cómo te tomó el llamado de Domizi y esta posibilidad?
Me acuerdo que estábamos regresando de Río Cuarto, donde habíamos jugado con la sub-17 (categoría que dirigía también) por el Torneo de AFA, y me llamó Cristian diciendo que tenía que hablar conmigo. Me sorprendió, más allá de tener con él una relación muy buena por el tiempo que habíamos trabajado juntos.
Le dije que estaba regresando y me respondió que lo llamara apenas llegara. Le comenté que llegábamos cerca de la medianoche y me pidió que lo llamara igual. Lo hice y me explicó que estaba esta posibilidad, que Diego tenía una propuesta y la estaba analizando. Que esté atento y vaya pensando.
Yo también me comuniqué con Juanma (Aróstegui, vicepresidente) para ver qué pensaba él porque yo estaba trabajando en inferiores y se dio todo muy rápido. No había nada que pensar, era una oportunidad muy buena.
Martelotto junto a Domizi, en el entrenamiento de este jueves en el "Boero". Bruno será la mano derecha del "pájaro" en el armado del equipo.
-Te tocó ser jugador y sos hincha de Sportivo Belgrano, ¿qué sensaciones te genera esta oportunidad?
Es una alegría muy grande. Me tocó pasar de todo en el club y en diferentes momentos: en divisiones inferiores, irme, volver para jugar un Torneo Argentino B, irme, volver de nuevo. Después, ya como entrenador, pasar por la captación y diferentes categorías.
A mí como hincha del club me pone contento por partida doble, pero a la vez es un desafío y una responsabilidad muy grande pero que me agarra en un gran momento. Todo lo previo me sirvió para llegar a este presente y estar preparado, porque de eso se trata: llegar pero de la mejor manera, estando capacitado y siendo un aporte para Cristian (Domizi). Espero estar a la altura y que salga de la mejor manera".
-¿Cómo te recibió el plantel?
Muy bien. Es un plantel joven, con muchas ganas, por suerte se dio después de un triunfo que eso también ayuda. El ánimo es muy bueno y todo es mejor después de un triunfo.
-¿Qué rol juega la familia en todo este crecimiento?
Ellos son vitales, nada de esto podría ser sin el apoyo incondicional de ellos que están siempre, que se aguantan los viajes, las horas y horas de dedicación, que están alentándome en todo momento. Son mi motor y siempre les estaré agradecidos.