“Merci beaucoup” Brian
"Muchas gracias" es lo que le dice el boxeo argentino a Brian Castaño, quien llega para sobrepasar la media que tiene hoy esta actividad por estas tierras.
En tiempos de renguera del boxeo profesional argentino la enorme victoria del bonaerense Brian Castaño (67,300) sobre el francés Cedric Vitu (68,100) el pasado sábado fue un bálsamo de agua fresca entre tanta mediocridad reinante que circunda al pugilato vernáculo.
En la lengua gala "merci beaucoup" tiene el significado de "muchas gracias", se le agradece a Brian esta gran conquista del pasado sábado en la tierra del champan y los perfumes caros ante el valiente peleador galo que fundido y duramente golpeado recién levantó la bandera de rendición en el duodécimo y último asalto, y a treinta segundos del final.
La Seine Musicale de la ciudad de Boulogne, ciudad cercana a la capital Paris fue la sede de este encuentro donde Brian retuvo por segunda vez su corona mundial de peso superwelter por la versión de la Asociación Mundial de Boxeo piloteada por el panameño Gilberto Jesús Mendoza.
A poco del comienzo del combate, los supervisores franceses le objetaron el vendaje a Brian, hubo momentos de alta tensión hasta que finalmente los fiscales lo aprobaron y firmaron las vendas ¿no habrá sido esta una maniobra dilatoria para desconcentrar a nuestro representante?
Algo del mismo tenor le sucedió a Brian ante el africano radicado en Francia, Michel Soro, en julio del pasado año, donde los señores jueces tardaron unos veinte minutos en tomar su decisión sobre el fallo hasta que presionados duramente por el manager Sebastián Contursi le otorgaron la victoria en un fallo mayoritario y absolutamente legítimo.
Aunque aquella ya es anécdota, Brian dio en la tarde-noche de nuestro país otra prueba de gran carácter y suficiencia ante el franchute de los pagos del mítico peleador peso mediano Marcel Cerdán quien se retiró en el año 1949 con 111 peleas ganadas, apenas 4 derrotas, y 65ko).
Mechando un poquito de historia, este emblema del boxeo francés se midió ante grandes talentos de su época de la talla de los estadounidenses Jake La Mota y Toni Zale, aunque con su buen porte se destacó además en las cuestiones del corazón, fue el amante de la célebre cantante parisina Edit Piaf, "el gorrión de Paris".
Y las andanzas en Francia del notable campeón mundial mediano Carlos Monzón ante un peleador de raza Jean Claude Bouttier, pelearon dos veces, en 1972 y 1973 y ambas fueron para el santafesino por la vía de los puntos. Con la promoción del actor francés, su amigo Alain Delón.