Pensando en volver
Franco Migliori habló de su determinación de regresar a Italia y sus ganas de seguir jugando consciente que ya ingresó en la última etapa de su carrera basquetbolística.
La pandemia lo trajo de vuelta a San
Francisco el año pasado y desde entonces se viene preparando con la firme
convencimiento de retornar a Italia en agosto venidero, tal es así que no pensó
en otra opción en caso de que surja algún impedimento.
Y no es para menos, sus 14 temporadas en el básquet del país europeo lo marcaron no solo en el plano deportivo sino también en el aspecto personal, algo que lo llevó a identificarse plenamente con la idiosincrasia italiana.
Igualmente su destino final será aquí junto a su familia en una manera de recuperar el tiempo que el deporte le robó. Fructífera carrera deportiva a la que no le puso fecha de vencimiento pero quiere disfrutar al máximo en sus últimos tramos.
Próximo a cumplir sus 39 años, Franco Migliori, se siente entero, pensante, con experiencia, una manera de suplir al otrora infalible goleador, cualidades que apuntalan sus ganas de seguir un poco más en suelo italiano, lugar donde piensa volver.
-¿Te estás preparando para volver a subir al avión?
-Hace del año pasado que estoy acá, en marzo se suspendió el torneo por la pandemia y volví el 9 de mayo, que coincidió con mis vacaciones que siempre son hasta agosto. Bueno, había conseguido equipo para volver pero como no salían los vuelos terminé perdiendo el año pero nunca dejé de entrenar.
Hago básquet en El Ceibo por lo que agradezco a su presidente Oscar Oldrino y a la gente que siempre me brindan las instalaciones para entrenar de manera incondicional y a "Mara" Blengini que me dejaba entrenar con el equipo hasta que aparecieron las restricciones. Voy al gimnasio también en el club y practico boxeo en el gimnasio de Roberto Gutiérrez, además de salir a correr.
La verdad que no aflojé ningún día, voy a cumplir 39 años -el 4 de agosto-, así que hay una edad en la no se debe parar porque se hace difícil aceitar el "motor".
-¿La prioridad es seguir en Italia?
-Mi idea es volver a Italia, es lo que quiero, lo que voy a tratar de hacer, obviamente no es fácil la situación por no haber jugado el último año y por la pandemia que perjudicó económicamente, hoy los clubes prefieren jugadores locales y ahorrar.
Mi representante está trabajando en eso y estoy esperando porque recién se están empezando a mover las contrataciones, tengo la esperanza de conseguir equipo sin importarme la categoría. Precisamente en los últimos años jugué en la B después de haberme operado el tobillo.
-¿El plan B será competir en Argentina?
-Es complicado porque las competencias manejan parecidos calendarios, en agosto está la pretemporada y octubre el campeonato. Voy a esperar hasta último momento con el problema que dejas pasar todo acá por el tema de los cupos. Ese es el riesgo a correr, más fácil sería si en Argentina empezaría la competencia dos meses después.
-¿De jugar en el país lo harías en cualquier categoría?
-No descarto nada porque uno nunca sabe lo que puede pasar, puedo surgir una linda oportunidad, un proyecto, porque tiene que ver también la edad. No es lo mismo a los 20 que cuando tenes 30 avanzados, uno analiza muchas cosas.
Vengo de jugar 14 años en Italia, acostumbrado a un tipo de vida, a un trato, respeto, un manejo, a los clubes con sus grandes instalaciones, una realidad que es diferente a la de acá. Dentro del sistema de trabajo allá es otra cosa.
-¿Mencionaste la edad como factor a tener en cuenta, pensas en el retiro?
-Es inevitable, en el básquet no hay una edad para retirarte y como en muchos deportes depende de muchas cosas, las ganas, cómo estas psicológicamente, la parte física es fundamental, la situación de vida como en mi caso de ser soltero es más fácil a la hora de tomar una decisión.
Ahora voy año a año, y sí quiero seguir jugando porque me siento bien, quiero disfrutar los últimos años que me quedan.
No me desespero como sucede con algunos colegas, me parece triste porque tengo motivos por los cuales ser feliz, tengo a mi mamá (Alejandra), mi hermana (Constanza), mi sobrino (Santino), mis amigos, puedo hacer un montón de cosas.
Obviamente es un cambio grande, un golpe duro para el que lo hizo toda la vida, pero hay muchas cosas que se pueden hacer fuera del deporte. No me veo como entrenador pero un rol dirigencial me gustaría, pero por ahora me veo afuera del básquet, pudiendo armar algún proyecto con mi amigo Miguel Oldrino.
-¿La vuelta a San Isidro es una pregunta recurrente, pero con la vuelta de Daniel Beltramo, no estudiaste esa posibilidad?
-Con Daniel tenemos una muy relación. Pero para mí es más difícil jugar en San Isidro que en cualquier otro lado, por un lado me encantaría porque es el club donde hice mi etapa de juvenil y del cual soy socio junto a mi núcleo familiar.
Ya me preguntaron por la calle si volvía, pero no es fácil, por mi edad y la parte económica porque esto es mi trabajo, pero hoy el motivo no es el económico, no es fácil para mí aclarando que no soy de esos que "roban la plata", porque me gusta trabajar serio, profesionalmente, pero no puedo dar lo que daba a los 20 años.
Me caractericé a altos niveles por el goleo pero ya no cumplo más ese rol, no soy el que haga 25 puntos por partido y es difícil que la gente lo entienda, más aún la que no sabe de básquet, hoy puedo aportar experiencia, tratar de poner en ritmo a los otros jugadores, son aspectos muy finos.
-¿Por la cantidad de temporadas en la liga italiana podría decirse que sos un "tano" más?
-Me siento tanto italiano como argentino, cincuenta y cincuenta. Tengo ambas nacionalidades y viví casi la mitad de mi vida en Italia -se fue a los 22-, quizás los años más importantes donde uno toma conciencia de todo, aprendiendo a desenvolverme solo, a formarme como hombre porque mi educación la traigo desde casa.
Uno valora la seguridad, estabilidad económica, es una realidad distinta a la de acá, por qué crees que muchos deportistas o no prefieren emigrar, por el tema del gobierno, la educación, se te brinda un futuro mejor.
-¿Igualmente tu lugar en el mundo será San Francisco?
-Mi futuro será en San Francisco por mi familia y mis amigos, claro que si tuviera la plata de Messi me los llevo a todos a vivir conmigo (risas). Pero no hay básquet, dinero o viajes por el mundo que tengan la importancia de mi familia, ya cuando falleció mi papá -el recordado Darío "Masita" Migliori- entendí que no quería estar más lejos de los míos.
Gracias a Dios lo que soñé de chiquito lo pude hacer deportivamente, un sueño de mi viejo y mi mamá, pero después entendí todo lo que te quita también que es el tiempo con la gente que amas. Por eso me hice la casa acá porque quiero estar cerca de mi vieja, mi hermana, mi sobrino y disfrutar con mis amigos también.