Por ahora, las finales serán día sábado
La final de la Copa Libertadores entre Boca Juniors y River Plate ya tiene fechas asignadas por la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) para los sábados 10 y 24 de noviembre, aunque el presidente "xeneize", Daniel Angelici, se opuso a esa decisión por considerar que no respeta la tradición de la comunidad judía.
La final de la Copa Libertadores entre Boca Juniors y River Plate ya tiene fechas asignadas por la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) para los sábados 10 y 24 de noviembre, aunque el presidente "xeneize", Daniel Angelici, se opuso a esa decisión por considerar que no respeta la tradición de la comunidad judía.
El títular de Boca avisó que dialogará con su par de River, Rodolfo D'Onofrio, para acordar otra fecha de disputa y que enviará una carta al organismo con sede en Luque, Paraguay, para formalizar el reclamo.
"Somos muy respetuosos de la colectividad judía y Boca no quiere jugar el sábado 24 por respeto a la cantidad de socios que no podrán estar presentes. Hablaré con D'Onofrio para ponernos de acuerdo y encontrar alguna variable para jugar el partido en un día y horario que beneficie a todos", declaró en radio La Red.
La programación anunciada por la Conmebol interfiere sobre el festejo del Shabat, un momento de descanso y reflexión de los miembros de la comunidad judía, que comienza el viernes al atardecer y culmina con la aparición de tres estrellas el sábado por la noche.
La Conmebol informó que ambos partidos se jugarán desde las 16 por razones de seguridad y también para atender los intereses de la televisión. El sábado 10 se jugará en La Bombonera y el 24 será la revancha en el Monumental de Núñez.
"No entendemos por qué no podía ser el domingo 11 y el 25. Puedo entender el horario por un tema de televisión y seguridad, pero también podría ser los sábados después de las 21 cuando la colectividad pueda participar del evento", argumentó.
Por otra parte, Angelici desestimó el pedido de Gremio de Porto Alegre para que se impugne el resultado de la segunda semifinal ante River Plate (2-1 en favor del conjunto argentino) por el incumplimiento de una norma de la Conmebol por parte del DT Marcelo Gallardo.
"Soy de la vieja escuela, de los que creen que los partidos se ganan o se pierden en la cancha. Lo dije cuando pasó lo del gas pimienta. En esa ocasión, creo que River ganó bien, tiene un gran equipo y debe jugar la final con Boca", concluyó.