Tan lejos, tan cerca
Cristian Bottero se fue muy joven de San Francisco, conoció a su esposa en Argentina, tuvo su primer hijo en Salta y luego el fútbol lo llevó por diferentes destinos, terminando su carrera en Ecuador, donde la vida le regaló dos hijos más y junto a ellos se instaló en Quito, donde nos recibió y nos hizo sentir "como en casa".
(POR FRANCO BARGAS)
El mundo es tan pequeño, qué a miles de kilómetros de
distancia de San Francisco, por un momento se puede volver a sentir que uno está
en casa. Es qué al hablar el mismo idioma, no por la lengua, sino por los
modos, más aún siendo futbolero, ayuda a pasar el tiempo.
Así fue como en Quito, nos encontramos con un sanfrancisqueño radicado en Ecuador desde hace muchos años. Alguien que se ganó parte de su vida con el fútbol, pero que una vez alejado del deporte, tuvo que empezar a tomar otros rumbos y el destino premió su esfuerzo.
Ya instalado en el centro del mundo, con un emprendimiento gastronómico de gran nivel, Cristian Bottero terminó de conformar una gran familia, junto a Evelina, su compañera desde hace ya más de 20 años y sus tres hijos.
Fue una noche distinta, donde además de la familia Bottero, llegaron otros argentinos y también ecuatorianos, armando una mesa muy amplia. "Estas visitan te hacen recordar las raíces". Así empezó la charla. Al menos la formal, la grabada. Porque fueron momentos de mucha distención. Con mates de por medio, risas, recuerdos y anécdotas de todo tipo, que nunca saldrán de las cuatro paredes de su domicilio. Porque allí fue donde Cristian recibió amablemente a LA VOZ DE SAN JUSTO y por unas horas, estuvimos "como en casa".
Los caminos de la vida
"Me fui de muy joven, pero dejé mi familia y amigos de la infancia, que uno los recuerda con tanto cariño. Vinimos a Ecuador en 1999, viví en varios sectores del país y después me radiqué en Quito, donde hice mi casa y tengo mi negocio. Nos gustó la capital por cómo es, hay mucho movimiento y con mi señora pensamos en quedarnos acá. Se fueron dando las cosas, por una lesión me retiré del fútbol, siempre tuvimos pensado poner negocios de gastronomía y lo hicimos. En 2008 comenzamos en Ambato y después a finales de 2009 nos vinimos a Quito. Son ya varios años, nos estabilizamos y estamos contentos".
"A mi esposa la conozco desde que tengo 15 años allá en Argentina por un amigo en común. Nos pusimos de novios y ya hace más de 23 años que estamos juntos. Jugando en Salta tuvimos nuestro primer hijo, Matías de 21 años, ya en Ecuador nacieron Lucas (14) y Julieta (3). Tenemos nuestra familia y vivimos tranquilos".
Siempre presente
"Tengo mi familia en la Argentina, hace 4 años la última vez que fui. Mi señora quedó embarazada de Julieta y ya no pude volver por diferentes cuestiones. Los chicos son los que mandan hoy en día y eligen el destino de las vacaciones, por eso hace tiempo que no voy por aquellos lados".
"San Francisco es mi cuidad, nací ahí y me crie. Estoy en contacto con mi mamá y mi hermana y hoy en día con internet es más fácil estar pendientes de las cosas que pasan allá en la vida cotidiana".
Su modo de vida
"Ya hace más de 9 años que estamos en el negocio de gastronomía. Por suerte entramos con el pie derecho, la gente nos conoce por nuestro trabajo. Estamos bien, peleándola como todos y ahora en pocos días si Dios quiere estamos abriendo otro restaurante, que es una apuesta importante para nosotros, en un lugar lindo de la ciudad. Estoy en otro rubro, pero el fútbol es lo que uno más siente en el alma".
Nuestro fútbol
"El contacto con el fútbol argentino es constante. Mi restaurante tiene su toque deportivo, nos visitan constantemente diferentes personalidades del mundo del fútbol, sumado a que jugué más de 12 años acá, donde tuve la suerte de ser goleador de un campeonato nacional y son cosas que a uno le quedan. El martes (hoy) vamos a ir a la cancha con la familia, somos futboleros argentinos y al estar Ecuador eliminado me hace las cosas más fáciles. Tal vez si los dos pelearan por entrar al mundial se complicaría y no te podría decir uno u otro, porque Ecuador me dio todo lo que soy como persona, pero a la vez soy argentino. Inclusive que Ecuador no vaya al mundial hasta a uno lo afecta en lo personal, porque mi negocio está cerca del estadio y se vive un clima futbolero. Pero espero que Argentina gane, que clasifique y que podamos estar en Rusia".